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Mayo del 2007LA FALSA LUCHA CONTRA STROESSNER
Por parapiti pora - 6 de Mayo, 2007, 13:07, Categoría: General
STROESSNER (Los farsantes de
COMPILADO POR LUIS AGÜERO WAGNER
“
No hace mucho tiempo se divulgó una encuesta revelando que apenas un tercio de los paraguayos mantenía su fe en la democracia, dato que debería haber sugerido un mayor espíritu autocrítica a quienes se adueñaron del país a partir de febrero de 1989. Para desgracia nuestra, estos personajes no sólo guardaron una enorme distancia de los conductores de otras transiciones democráticas (como Frei o Lagos en Chile, por ejemplo) sino que además pretendieron imponer una historia autocomplaciente y fantasmàtica de "lucha inclaudicable" contra la dictadura para censurar toda crítica a sus deshonrosos actos de estos últimos 18 años. Quienes no fuimos protagonistas –por motivos varios, entre ellos generacionales- de la resistencia contra la dictadura, en estas últimas dos décadas nos hartamos de ver en el escenario olímpico, monopolizando Micrófonos, a los "grandes Héroes" de la "democracia" como Andrés Rodríguez, Calè Galaverna, Humberto Rubìn, Aldo Zucolillo, Pepa Kostianovsky, Domingo Laìno, Carlitos Filizzola Pallarès, Alcibíades González Delvalle, etc, etc. Debemos suponer, dado la forma excluyente en la que han obrado todo este tiempo y la inmensa responsabilidad que han tenido en el rumbo de esta perpetua transición la mayoría de ellos, que éste país que hoy tenemos es el que deseaban cuando "luchaban" contra Stroessner. Un lugar donde citar el Apocalipsis o leer las noticias son en la práctica casi la misma cosa. Nada más revelador de lo que vendría como el matiz de los hechos que pusieron en marcha la transición: el cierre de cuatro entidades financieras y un golpe casi incruento, sin alternancia de partidos ni grupos. La familia Rodríguez reemplazando a la anterior en todos los buenos negocios, incluyendo medios de comunicación, y las nuevas camarillas interpretando muy pronto las nuevas formas de impunidad acordes a una "democracia". El conocido ex jefe de Digamos que no es un caso muy distante al de Humberto Rubìn, que aceptó en 1977 el obsequio que le hizo Stroessner de dos mil hectáreas de tierra, en plena zona de conflicto entre represores y las Ligas Agrarias. O de Aldo Zucolillo, gran luchador por la libertad de expresión, que combatía por la democracia fustigando desde las páginas de ABC color la política a favor de los Derechos Humanos de Decía Jacobo Timerman que se necesita a los mejores periodistas de la izquierda para hacer un buen periódico de derecha, lo cual sería aplicable a ciertos periodistas de la patria publicista, si no hubiera estado mal informado Stroessner al tildarlos del “subversivos”. La apertura de los archivos del terror no sólo permitió conocer muchos atroces procedimientos policíacos, sino además descubrir lo mucho que eran capaces de abrir la boca algunos “grandes luchadores” contra la dictadura. La mucha o escasa difusión de estos documentos sensibles, obviamente, quedó librado al arbitrio y estado de ánimo del áulico círculo imperante en la superestructura cultural y su patria periodística. Entre los documentos más reveladores se cuenta a una declaración del 4 de diciembre de 1975, extraída a Miguel Gregorio Chase Sardi, quien asistido quizás por sus conocimientos de antropología, había logrado engañar tanto a Stroessner como a los mismos jerarcas de Otro caso análogo que podríamos citar es el del policía de Cuando el Fiscal Clotildo Jiménez acusó al policía de Había sido precisamente Levi Ruffinelli un pionero en la colaboración con la dictadura, allá por la década de 1960, aceptando el puesto de alcahuete rechazado con dignidad por otros dirigentes liberales como Carlos R. Centurión. Es que se necesitaba a un parlamento representativo en vísperas de firmarse el entreguista tratado de Itaipù, tan lamentado hoy por los diarios comprometidos con la libertad de expresión. Pensamos que ni falta hace recordar antecedentes de otros grandes próceres de la democracia como Domingo Laìno, pescador en directorios liberales revueltos, donde el común denominador era la trepada a costa de la integridad física del correligionario por medio de delaciones ante el temible Pastor Coronel. O de un Carlitos Filizzola Pallarès, perseguido por la dictadura hasta en sus enredos con la policía de Tránsito por chocar con un coreano, hoy convertido a los 45 minutos del segundo tiempo (igual que en épocas pasadas) en rabioso anti-oficialista. Y conste que lo hace después de haber sido el pasionario defensor de las políticas deflacionarias y tributarias del nicanorismo, impartidas desde Hacienda y el BCP, con sus histéricos discursos en el Senado. Tanto contraste entre la realidad y la historia oficial sólo puede hacernos sospechar que un juicio tan tendencioso del pasado, generando una instrucción tan parcialista del presente, además de generar tanto despropósito político, debe resultar bastante lucrativa para quienes se abocan a repetirlo con tanta insistencia.
Luis Agüero Wagner
STROESSNER Y LOS AÑOS DE TRANQUILIDAD DESESPERADA (I) Entre las numerosas dictaduras que registra la historia del Paraguay, la del general Alfredo Stroessner, fue sin duda alguna la más temible, la más perversa y perdurable que ha soportado el pueblo paraguayo. En una entrevista concedida a Madeline Foley -"Wisdom", NBC 1955- cuenta el músico catalán Paul Casals que el 18 de julio de 1936 estaba ensayando la 'Novena sinfonía' de Beethoven y recibió la orden de abandonar el local porque las tropas de Francisco Franco podían atacar en cualquier momento. 18 años después, a Beethoven le tocó la misma suerte. En la noche del 4 de mayo de 1954, el concierto que ofrecía el maestro Carlos Lara Bareiro en el Teatro Municipal de Asunción no pudo concluir; se lo impidió el golpe del general Stroessner, que provocó la caída de Federico Chavez. Si en el origen de la tragedia española estuvo la "Novena Sinfonía", de Beethoven, su "Sinfonía Heroica" fue para nosotros el preludio de treinta y cinco años de tranquilidad desesperada. Entre las numerosas dictaduras que registra la historia del Paraguay, la del general Alfredo Stroessner, fue sin duda alguna la más temible, la más perversa y perdurable que ha soportado el pueblo paraguayo. Ahora que el nieto del dictador, Alfredo Stroessner Domínguez se lanzó a la arena política, reivindicando la "larga era de paz y de progreso" que vivió la "República de su abuelo", es oportuno hacer un poco de memoria. Como parte de un trabajo más extenso, este resumen de iniquidades resultará naturalmente incompleto. No obstante, en este breviario de urgencia podrá apreciarse que en el régimen de Stroessner la tentación totalitaria se manifestó desde un principio y prueba de ello está en que ya en octubre de 1955 promulgó En 1955 el caudillo colorado Epifanio Méndez Fleitas y sus seguidores tuvieron que marchar al exilio; en mayo de 1958 Stroessner recibe la "grata" visita de Vernon Walters y de Richard Nixon; declarada la huelga general en el mes de agosto de 1958, la policía responde con una brutal represión, encarcelando a los principales dirigentes de la oposición, quienes no saldrían de prisión sino veinte años después. En marzo de 1959, un sector del Partido Colorado, reclamó la normalización institucional del país, a la que Stroessner respondió con la disolución de Naturalmente, como es imposible hacer aquí un inventario de todos los males causados por la dictadura, sólo puede señalarse algunas de sus características, como la sistemática violación de los derechos humanos, la intolerancia política, la absoluta falta de libertades públicas, la corrupción generalizada, entre otras. El Estado de Derecho no existía, el monopolio de la fuerza y el aparato judicial eran utilizados conforme a los siguientes criterios: la arbitrariedad y la fuerza bruta contra los adversarios, garantía de total impunidad para los amigos y todo 'el peso de la ley' para quienes no se decidían a tomar partido. El dictador Stroessner fue realmente implacable con los opositores a su régimen y contó, hay que decirlo, desde un principio con un selecto grupo de torturadores de los Estados Unidos de América. Un año antes del golpe contra el presidente Federico Chávez, en 1953, el futuro dictador, invitado por los generales Emil Kiel y Robert Stevens, visitó EE.UU y Estados Unidos de América -que ya había empezado su "guerra fría" con Rusia, y tras la reunión de Eisenhower/Stroessner, en Panamá, en julio de 1956-, asignó a Paraguay la imprecisa misión de jugar una guerra ajena, ofreciendo a cambio préstamos de No obstante, durante la prolongada dictadura, la propaganda oficial de Stroessner siempre insistió en el carácter democrático de su régimen, sin importar que sus adversarios pasaran décadas enteras en las cárceles. Para el general Stroessner no había contradicción alguna entre la existencia de prisioneros de conciencia y la 'democracia' por él postulada. Esta singular concepción de la democracia se apoyaba en los siguientes fundamentos: a) un derecho no consagrado no puede ser violado; b) los comunistas no tienen ningún derecho: Ley 294/55 y 209/70; y c) todos los adversarios políticos del régimen son comunistas. De estas rígidas premisas extraía el dictador la conclusión de que el adversario político no tenía derecho alguno. Esta es probablemente la razón por la que los alabarderos del dictador no se sientan mortificados por problemas de conciencia, por haber apoyado la tortura, el destierro y el asesinato de miles de compatriotas. Desde luego, como beneficiaria de la dictadura, la clase política -que aún hoy maneja el poder político y económico del país-, no tuvo inconvenientes ni reparos en aceptar como democrático el despótico régimen de Stroessner, un gobierno que violaba con total impunidad los derechos humanos. Las generaciones futuras, de hecho, habrán de recordar que destierro, prisión, tortura y muerte eran nombres de algunas estaciones de este calvario recorrido por miles de paraguayos. Mientras muchos envejecían en las cárceles o chillaban de dolor en las cámaras de tortura, para un grupo funesto de paraguayos, que se volvía cada vez más inmensamente rico, el festín parecía interminable. De nada sirvieron los reclamos porque los derechos humanos sean respetados, y no sirvieron porque los despreciables alabarderos del dictador no querían ver el enorme daño que estaban causando al país : prefirieron seguir ejerciendo profesionalmente la ceguera. De pronto, el día menos pensado de 1989, el general Andrés Rodríguez, un consuegro eternamente insatisfecho, desaloja con otro golpe militar al más antiguo inquilino del Palacio de López. Civiles y militares salieron entonces de sus cuarteles a pactar los términos políticos y económicos de la transición. Los partidarios de la impunidad, apresurados en patentar la virtud de adecentar a los mercaderes de la muerte, terminaron confundiéndose con ellos. Desde luego, del blanqueo político, no podía esperarse otro efecto que el del agua bendita adulterada: la impunidad no iría a transformar en corderos a las fieras. La penúltima consecuencia de tal ilusión está a la vista: casi todos los partidarios de Stroessner están de regreso y así como están las cosas, pronto tendremos a otro dictador instalado en el poder. A 17 años de iniciada la transición, los políticos que no creyeron en el "retorno de los brujos" y los "heraldos negros" de la impunidad deben estar íntimamente convencidos de que ya no habrá para ellos redención más saludable que beberse un abundante trago de cicuta.
EL LIBERAL EN SU LABERINTO. LAÌNO DESCUBRE Había transcurrido una década y media desde aquella visita que en 1962 el doctor Carlos R. Centurión le hiciera al entonces ministro del Interior, Edgar L. Ynsfràn. Al Departamento de Investigaciones llegaban dos presurosos caballeros, Fulvio Hugo Celauro y Serviliano Alonso Peralta; eran las 19:30 del 18 de enero de 1977 (Archivos del Terror, libro P34). El oficial de guardia, Dionisio Noldin Velásquez (quien fue, entre otros, mi torturador en julio de 1974 y actual jefe de El líder del PLRA Domingo Laìno, descubrió que Stroessner era un dictador exactamente el día 21 de mayo de 1978, cuando viajó a Estados Unidos con pasaporte diplomático otorgado por el dictador, nº 0058. El ex diputado de la dictadura viaja a Estados Unidos para asistir a la reunión de Esta influencia tiene su origen, no como se cree, en las sabias consideraciones sobre “la pollera colorada y la guayabera”. Esta antigua influencia data de 1987, cuando por orden de Stroessner, el escribano Vàzquez, Emilio Forestieri y el jefe del Ceremonial del Estado, Conrado Pappalardo, hicieron posible que Laìno volviera al Paraguay el 25 de abril de 1987, “para que con el lema de la no violencia activa organizara el caos que estaba armando la oposición”. ZUCOLILLO: “CUENTERO ENREDADO EN SU LENGUA” (III) El lunes 13 de marzo de 1995, ABC color (p.14) publicó una nota editorial en la que hablaba sobre “El retorno de Stroessner y el juicio a la dictadura”, poco más arriba de la página editorial puede leerse: “Clausurado por la dictadura el 22 de marzo de 1984 por defender la libertad”. (La pregunta que se impone es: ¿Cuándo lo hizo?). No hay motivo para cuestionar el presumido aserto del eslogan sobre todo en su primera parte. Tampoco hay motivo para no decir que ABC color comenzó supuestamente a “defender la libertad” 17 años después de su fundación, cuando Stroessner ya estaba en vísperas de cumplir su trigésimo aniversario en el poder. Podría decirse también que –sin que sea necesario aplicar la cinta métrica a la obsecuencia-, entre 1967 y 1984, ABC color prodigó tantos elogios al dictador en sus páginas, que serían más que suficientes como para empapelar con ellas todo el Palacio de López. Por tanto, en el juicio a la dictadura debe incluirse a sus alabarderos, a sus beneficiarios (Zucolillo entre ellos) y a quienes la legitimaron. Aldo Alberto Zucolillo fundó ABC color, el 8 de agosto de 1967, bajo el padrinazgo del general Alfredo Stroessner, quien asistió a la inauguración del “diario joven con fe en la patria”. Desde entonces, y hasta poco antes de su clausura en 1984, en incontables editoriales, Zucolillo defendió con vehemencia la política y la larga era de paz y de progreso del gobierno del general Stroessner. Claro está, los negocios de los Zucolillo prosperaban gracias al “ilustre jefe” y por ello era frecuente encontrar a ambos en numerosas “estampitas” de la época. (Recuérdese que Zucolillo proveía de automóviles Chevrolette (caperucitas) a la policía de Stroessner, por lo que el cinismo resulta evidente cuando menciona en “Hace 10 años”, que “la sola presencia de las caperucitas en los barrios resultaba traumática para cualquier ciudadano” (Abc color, 29/VII/97). “Fotografías de Zucolillo con Stroessner deben haber varias –decía-…la verdad que todos queríamos salir con él, yo también ¿Por qué no?” (Radio Ñandutì, 12/XII/96). Mezcla de “Banqueiro Anarquista” y “Mendigo Ingrato”, Aldo Zucolillo se afilió tempranamente al imbatible partido de “la billetera”; militó en causas muy diversas y siempre que sus emprendimientos comerciales estuvieran asegurados, el más perverso sistema de gobierno era elogiable. “Es cierto –dijo también-, pueden haber 20 años, los primeros del gobierno de Stroessner yo querría que alguien me niegue que fueron muy constructivos, que pueden haber defectos de derechos humanos, con mucho gusto acepto. Pero, que fueron constructivos lo fueron y nuestros editoriales descifraban eso, 20 años de construcciones” (Radio Ñandutí, 12/XII/96). Este es el Zucolillo real, retratado por él mismo. El “cuentero Zucolillo” tenía fuertes vínculos con el general Stroessner, lo que explica por qué están notoriamente ausentes de su lista de “Hace 10 años” su hermano Antonio (Tuco), consuegro de Stroessner y embajador en Londres, su hermano Julio César, delator al servicio de Pastor Coronel y su célebre cuñado, Conrado Pappalardo Zaldìvar, encargado de los actos ceremoniales del dictador. Con estos antecedentes, y para decirlo con palabras del propio Zucolillo: “Es bueno que la memoria colectiva no se deje confundir por la inversión de culpas y responsabilidades que en esta campaña electoral se intenta, quizás porque quienes la inventan y la utilizan confían en que, de tanto falsear el pasado, la memoria de este pueblo flaquee, se desoriente y acabe por absolver a los verdaderos culpables de nuestros males presentes”. Finalmente, este comentario, señor Zucolillo, tiene precisamente ese propósito: “No falsear el pasado”.
HUMBERTO RUBÍN: “ “Yo soy progresista desengañado, y usted, tradicionalista arrepentido. Tenemos algo en común: el creer que todo esto es una comedia y que sólo se trata de saber a quien le toca mamar y a quién no”. Benito Pérez Galdós. “Fortunata y Jacinta”, 1887
Como ya hemos señalado en “Periodismo y Servilismo”, la cómoda postura asumida por la prensa ante la dictadura de Stroessner es hoy una de las historias más complacientemente contada. Y es curioso que así sea, pues salvo algunas excepciones, la prensa estuvo estrechamente vinculada al dictador. En Paraguay la primera víctima de la transición democrática también fue la verdad. En este sentido, se ha contrariado parcialmente el discurso pronunciado en el Capitolio en 1917, por el senador norteamericano Hiram Warren Johnson (1866-1945), quien habría expresado que “la primera víctima de la guerra es la verdad” (the first casualty).
BENEFICIARIOS DE
Uno de los principales beneficiarios de la sanguinaria dictadura de Alfredo Stroessner, fue Humberto Rubín, quien ha dedicado en los últimos años un considerable esfuerzo tratando de borrar de la memoria colectiva su fama de "mendigo ingrato" y su muy provechosa vinculación con el régimen dictatorial. Según algunos memoriosos, excluyendo al Jefe de Investigaciones, Pastor Coronel y sus "macheteros de Santaní", Humberto Rubín es el que por más tiempo figuró en la lista de privilegiados de la dictadura. Entre otras cosas, debe a sus amigos "stronistas" de antaño la adjudicación de enormes extensiones de tierra, además de su propia radio.
NACIMIENTO DE RADIO NANDUTÍ.
Radio Ñandutí era un emprendimiento conjunto del músico Teófilo Escobar(1), Humberto Rubín y del coronel Pablo Rojas, recaudador de Stroessner. Uno de los motivos de la apertura de Radio Ñandutí, que inicialmente se pensó llamar "Radio Excelsior", fue "apoyar la campaña electoral Stroessner Presidente, 1963-1968". Finalmente, el 29 de noviembre de 1962 el dictador Stroessner asistió a la inauguración de la radio, acompañada de su esposa, doña Eligio Mora de Stroessner. Por consiguiente, "Radio Ñandutí" es un emprendimiento que contó desde su origen con la bendición del general Stroessner. Entre los amigos de Humberto Rubín -en orden de aparición-, figuraban entonces el comandante Francisco Feliciano "Manito" Duarte (Presidente de la telefónica estatal, Antelco), Alejandro Cáceres Almada (locutor de la "Voz del Coloradismo") y su queridísimo tío Adán Godoy Jiménez (Ministro de Salud, 1969-1989). Sin embargo, queda para ulteriores comentarios "la larga era de paz y de progreso" que vivió
(1) Teófilo Escobar, músico y cantante paraguayo, autor de la canción Agüita Mansa, nació en asunción en 1924. Falleció el 16 de junio de 1993".
RUBÍN Y SUS "MICRÓFONOS DE ORO"
Efectivamente, en el séptimo aniversario de Radio Ñandutí, el 29 de septiembre de 1969, Stroessner dio luz verde para que el "Canal 9 de Televisión Cerro Corà" (propiedad de Gustavo Stroessner Mora) transmita desde el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social la entrega del "Micrófono de Oro" al doctor Adán Godoy Jiménez, nombrado ministro el 21 de agosto de ese año, "por ser el primer locutor que llega a Ministro". Además de querer congraciarse con el Ministro Salud, hay que señalar que Godoy Jiménez es tío de Gloria Godoy Montórfano, esposa de Humberto Rubín. Entre los "méritos" del ministro Godoy Jiménez no sólo figuraba el de ser locutor de "La voz del coloradismo" y de "Habla el partido colorado", sino también el hecho de haber demostrado una increíble crueldad como médico del Policlínico Policial, lugar donde se revivía a los torturados, para que la víctima no muriera antes de declararse comunista.
LOS MÉRITOS DEL MINISTRO ADÁNGODOY JIMÉNEZ.
Humberto Rubín no tuvo inconveniente alguno en otorgar su "Micrófono de Oro" al doctor Godoy Jiménez, pese a los serios cuestionamientos que se le hacía en materia de derechos humanos. En este sentido, el capitán Hilario Ortellado cuenta en sus memorias la lenta agonía del preso Domingo Regalado Brìtez, quien empezó a enfermarse un día de febrero de 1966 y que a los pocos días ya había perdido el habla. Sigue contando Ortellado "que el día miércoles 24 de agosto, el Secretario General de El capitán Ortellado anota en su diario -jueves 2 de febrero de 1967- cuanto sigue: "Hoy, víspera de San Blas, tuvimos la noticia de la muerte de quien en vida mera nuestro compañero de martirio Domingo Regalado Brítez". Otro testimonio, igualmente desgarrador, es el de Heriberto Florentín Peña, quien señala a Adán Godoy Jiménez como el médico del Policlínico Policial que inspeccionaba a los torturados, pero sólo para que éstos no cometieran la ingratitud de morirse antes de declararse comunistas o culpables del delito que se les quería atribuir. Este desalmado es el Humberto Rubín verdadero, no el que desde su radio dicta cátedra de moral a los "hijos iluminados de la sombra". Un hombre sin escrúpulos, en cuyo prontuario de iniquidades figura el de haber premiado a nuestros verdugos.
DE MICRÓFONO DE ORO A MICRÓFONO DE LATA PLATEADA
Entre los laureados con el "Micrófono de Oro" estaba el Comandante de Transmisiones Francisco "Manito" Duarte, "por haber facilitado la transmisión desde Venezuela y Colombia de los partidos de fútbol de las eliminatorias del mundo". Nunca como en este caso es más aplicable el proverbio de "quien siembra vientos recoge tempestades", pues "el laureado Manito" integró después la "murga" que interferiría las transmisiones de Radio Ñandutí. También el Dr. Raúl Alfonsín fue premiado, pero tuvo menos suerte que los otros. El 21 de julio de 1990 le fue otorgado el "Micrófono de Plata", seguramente porque para Humberto Rubín el ex presidente argentino no reunía los méritos de sus ilustres predecesores.
EL DESPRECIABLE NEGOCIO DE LA "ADULONERÍA"
Los antiguos privilegiados de la dictadura, como Humberto Rubín y otros renombrados compañeros de ruta, son los que hoy deciden quiénes deben ir a la hoguera y quiénes están habilitados a compartir con ellos el palco reservado a los Dioses del Olimpo. Desde que el dictador decidió retirarle su "patente de corso", Humberto Rubín pasó a la vereda de enfrente y después de la caída de Stroessner reivindicó para sí, el "don" de la infalibilidad, que hasta entonces estaba reservado exclusivamente al Santo Padre. Mucho antes de ponerse al servicio de Stroessner y de los gobiernos de turno, según puede verificarse en el archivo fotográfico de Montoya Correa Palacio, Rubín y otros caballeros del pasado practicaban ya la rudimentaria ecología de andar siempre detrás de las botas. Por ello, hay que tener muchísimo cuidado con estos corsarios, no sólo cuando confeccionan su lista de los que deben arder en la hoguera, sino también porque han reivindicado para sí el exclusivo derecho de encenderla.
RUBÍN, ANIMADOR DE LOS CUMPLEAÑOS DE STROESSNER
Humberto Rubín fue el eterno animador de los cumpleaños del general Alfredo Stroessner. Aún hoy se recuerda el kilométrico elogio que Rubín le dedicó al "Ilustre Jefe" el 3 de noviembre de 1979, en ocasión del gran Festival de Gratitud por
CAJA COMPENSADORA
El "puñado de tierra" que no lograron los campesinos en décadas de lucha organizada, Humberto Rubín consiguió con la infalible receta de la adulación, que era la moneda de curso legal en aquellos años interminables de tranquilidad desesperada. El servilismo tenía abultados precios en las ventanillas gubernamentales. Tanto es así que, durante la prolongada dictadura de Stroessner, funcionaba una suerte de Caja Compensadora donde el servilismo y la adulación eran facturados a un precio sumamente razonable. De allí salían adjudicaciones de dilatadas extensiones de tierra, que favorecía a una selecta colectividad. Rubín, ambicioso y listo como el hambre, también empezó a explotar exitosamente el despreciable negocio de la adulonería. Conforme al expediente Rubín / Irala 1973, que contiene documentos sobre adjudicación de tierra, obrantes en el Instituto de Bienestar Rural, "el gran luchador" Humberto Rubín fue beneficiado por Alfredo Stroessner con 2.000 hectáreas de tierra en la localidad de Domingo Martínez de Irala, contrariando expresas disposiciones del Estatuto Agrario, Ley No 864/63. Rubín ciertamente no era ni fue nunca sujeto de la reforma agraria, pero para un privilegiado animador de los cumpleaños del dictador poco importaba ser sujeto de la reforma agraria. Por sus servicios a la dictadura, Humberto Rubín figuró en la lista de beneficiarios del dictador hasta bien entrada la década del '80. De las tierras adjudicadas a Rubín quedan constancia en
HUMBERTO RUBÍN DESCUBRE
Poco más de treinta años después de iniciada la dictadura, Humberto Rubín descubre que el general Alfredo Stroessner no era un demócrata, sino un "deslustrado déspota". Inmediatamente cruza a la vereda de enfrente para convertirse sin más trámites en un ferviente demócrata y en un cliente privilegiado de la “National Endowment for Democracy”, una de las tantas organizaciones que le proveía de miles de dólares a cuenta de su nueva convicción. Remar hacia la otra orilla estaba dando excelentes resultados, y desde 1986 Rubín pudo comprobar que ser "demócrata" era tan rentable como lo fue en otro tiempo el negocio de la adulonería. Decidido a explotar este nuevo rubro comercial, hace un curso acelerado de "demócrata", practica día y noche, hace dieta, baja de peso, y en poco tiempo acumula todas las virtudes “facturables” en ventanillas de ultramar.
DÓLARES PARA RUBIN
A diferencia del propietario de "Radio Ñandutí", los campesinos siempre recibieron tortura y plomo por alzar su voz de valiente contra la dictadura y no hubo para ellos lluvia de dólares de
RUBÍN Y LAS VENTAJAS DE
El 28 de enero de 1968, dos semanas antes de las elecciones nacionales, fueron apresados Saturnina Almada y Alfonso Silva, quienes en orden de precedencia se convirtieron en los primeros presos políticos del "proceso democrático" que tanto elogio mereció por parte de Humberto Rubín (1969) y que la oposición rastrera se encargaría de legitimar en las farsas electorales del 11 de febrero de 1968. El dictador Stroessner no había hecho ninguna concesión en materia de derechos humanos. Y no sólo no hizo concesión, sino que a los centenares de presos políticos que llevaban ya años en las comisarías, se sumarían con el correr del tiempo otra cantidad tan grande de presos, a tal punto que en el mes de septiembre de 1976 se tuvo que habilitar como campo de concentración la antigua prisión de Emboscada.
OPOSICIÓN RENTADA PREFIERE RADIO ÑANDUTÍ
A principios del mes de febrero de 1977, dos dirigentes liberales eligieron la radio de Humberto Rubín para hablar sobre "la auténtica democracia que vive el pueblo paraguayo, gracias al constructivo gobierno del general Stroessner". Claro, después se supo el verdadero motivo de semejante elogio. El 18 de enero de 1977, llegaron apresuradamente al Departamento de Investigaciones los señores Fulvio Hugo Celauro y Serviliano Alonso Peralta, dirigentes del partido liberal (Archivo del terror, CDA, Libro P.34). Eran las 19:30 cuando el oficial de guardia, Dionisio Noldín Velázquez (uno de los torturadores que goza de impunidad) hizo pasar a los dos caballeros a Investigaciones resolvió las disputas entre liberales tal como se esperaba, es decir, a favor de Celauro y Alonso.
RUBÍN PREMIADO POR DOBLE PARTIDA
La complaciente historia que presenta a Rubín como un luchador insobornable contra la dictadura de Stroessner, es interesadamente falsa y cuya falsedad puede ser demostrada con hechos reales, actos y documentos. Por ello y en honor a la verdad histórica, hay que decir que este "verso" fue inventado, corregido y aumentado para que Humberto Rubín pudiera recibir el Premio "Pablo Iglesias" y el de "María Moors Cabot", y fundamentalmente para que pudiera recibir la plata dulce de
RUBIN DENUNCIADO EN Señor PROCURADOR GENERAL DE E. S. D. NEMESIO BARRETO MONZÓN. con C.I.Nº 2.491.906, domiciliado en la casa Nº 239 de la calle Caranday de la ciuidad de Lambaré, con legítimo interés en la buena administración de los bienes públicos, por derecho propio, y de conformidad a HECHOS: 2.000 hectáreas de tierra para Humberto Rubín .Conforme a documentos del Instituto de Bienestar Rural –Expediente Rubin/Irala- Humberto Rubín fue beneficiado por el dictador Alfredo Stroessner con 2.000 hectáreas de tierra en la localidad de Domingo Martínez de Irala (Finca Nº 362/73), contrariando expresas disposiciones del Estatuto Agrario. En efecto, y conforme a Estas tierras, como tantas otras, fueron otorgadas en forma irregular a allegados y amigos (civiles y militares) del sanguinario dictador. Producto de privilegios que otorga el poder discrecional, estas tierras deben ser recuperadas, incluyendo el producto del usufructo irregular de las mismas, que tomando valores constantes en USA dólares (139.677) suman un total de 4.330.000 dólares americanos.-------------------------------------------------Por tanto, y en virtud de lo precedentemente expuesto, solicito que el Señor Procurador General de NEMESIO BARRETO MONZON
PERIODISTA ESTRELLA ERA POLICÍA.
La actitud periodística de “Le Roi est mort, vive le Roi” (muerto el Rey, viva el Rey); es decir, la complacencia y el posterior acomodo, ha tenido notables exponentes. En El pasado 9 de febrero apareció este curioso artículo en el diario Abc-color: ¿Stroessner cumplía órdenes de EE. UU? Por Alcibíades González Delvalle. “Se dijo por ahí que Stroessner reprimía salvajemente a los opositores en cumplimiento de una orden del gobierno de turno de los Estados Unidos de Norteamérica. Como todo disparate, no faltó quien lo repitiera en la convicción de que el dictador fue víctima de una política…” (etc.) Ignoro cuál pueda ser el interés de Alcibíades González Delvalle de exculpar a los americanos. Presumo, sin embargo, que un periodista “serio” y al mismo tiempo empleado público, no debe quedar mal con el embajador de los EE.UU. de América, John F. Keane, quien el 25 de agosto de 2005, en un acto oficial, hizo entrega al Intendente de Asunción, Enrique Riera, una donación de 26.600 dólares americanos, provenientes del Fondo del Embajador de los EE.UU. No queda claro si González Delvalle está convencido de lo que escribe o si influyó en él el hecho de haber estado presente en el acto de entrega de la donación, en su carácter de Director de Cultura de para su ascenso por el propio Ministro del Interior, Dr. Edgar L. Ynsfrán.
Libertad de prensa
Stroessner había cumplido 25 años en el poder cuando el entonces Ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Dr. Alberto Noguès, por nota del 2 de julio de 1979, informaba al presidente de Alcibíades González Delvalle, columnista del diario Abc-color, no dijo nada sobre la “irrestricta libertad de prensa”, hasta que fue detenido el 5 de noviembre de 1979 en virtud del Art. 79 Constitución Nacional, 1967. Estuvo preso hasta el 21 de diciembre de 1979 (44 días). Por aquel entonces escribió "Qué ocurre en los tribunales, II" motivo por el que fue nuevamente detenido el 25 de junio de 1980 por orden judicial (Ley 209/70) y estuvo preso en la cárcel de Tacumbú, hasta el 2 de septiembre de 1980. González Delvalle fue invitado varias veces por el Departamento de Estado, cuando “el pistolero” Ronald Reagan (1911-2004) era presidente. Tanto es así que cuando el infame Fiscal General del Estado, Clotildo Giménez, ordenó la instrucción del sumario, González Delvalle se encontraba en EE.UU., desde el 24 de mayo de 1980. Al Departamento de Estado le interesaba "la guerrilla de las Ligas Agrarias", que no era sino un eufemismo para referirse a la masacre de campesinos en Caaguazú, ocurrida el 8 de marzo de 1980. En cuanto al juicio a Alcibíades González Delvalle, por violación de
¿Un olvido involuntario?
La generación más joven se quedó con el recuerdo de Alcibíades González como un periodista perseguido. Pero este perseguido tenía otras historias. Alcibíades Cristóbal González Delvalle, nació el 10 de julio de 1936, se incorporó a los 22 años en la temible policía de Stroessner en una de las épocas más duras de la represión, cuando el Ministro del Interior Edgar Ynsfrán y el coronel norteamericano Robert K. Thierry encontraban "comunistas" hasta en la sopa. Para quienes no conocen esta parte de la historia, es saludable que lo sepan: Alcibíades González Delvalle fue policía en un período de crudelísima represión, dirigida por el ministro Ynsfrán. Según una publicación de la época “La masacre de prisioneros de Tava-i fue dirigida personalmente por Edgar L. Ynsfrán, el general Patricio Colmán, y el siniestro torturador Arturo Hellman”. (Fuente: ‘‘CRIMENES Y ATROCIDADES DE STROESSNER’’. 1960). El ministro del Interior, Edgar L. Ynsfrán, contaba con un eficiente equipo de colaboradores, con licencia para matar: el coronel norteamericano Robert k. Thierry, general Patricio Colmán, el coronel José María Argaña, José Ignacio Irrazábal, el Jefe de Policía Ramón Duarte Vera, Riveros Taponier, Juan Erasmo Candia, Alberto Raimundi, Arturo Hellman, Alberto Planás, Antonio Campos Alum. (Luego vendrían Sabino Montanaro, Pastor Coronel, Camilo Almada Morel, Lucilo Benítez, Alberto Cantero, Juan Martínez, Dionisio Noldin, Nestor Alvarenga, entre muchos otros). El equipo del Ministro Ynsfrán se especializó en encontrar comunistas hasta en la sopa y luego venía la represión de los subversivos y conspiradores “contra el ilustrado gobierno colorado del general Stroessner”; ordenaba que a los subversivos se les sacara los ojos y se los castrara para luego arrojarlos al río Paraná. (Fuente: Epifanio Méndez. Lo Histórico y Antihistórico en el Paraguay. Buenos Aires, 1976. Revista Ñande. N° 147. Asunción, septiembre de 1965. Crímenes y atrocidades de Stroessner’’. Editado en En Resumen, entre 1956-1966 se registró en Paraguay un período de crudelísimas represiones. Era la época en que el general Patricio Colmán se divertía arrojando de sus avionetas a enemigos políticos del régimen de Stroessner, guerrilleros supuestos o reales. Colmán fue una especie de “adelantado” –en sentido ibérico del vocablo -; sus “vuelos de la muerte” fue puesta en práctica en Paraguay 15 años antes de que lo hicieran Adolfo Scilingo y el capitán Jorge Eduardo “el tigre” Acosta, en
Alcibíades González Delvalle, era policía de Stroessner
Ministerio del Interior Decreto N° 13.125, del 9 de noviembre de 1960, por el que se nombra como Oficial 2° de Orden Público, Tránsito e Investigaciones de El Presidente de Firmado: Alfredo Stroessner, Presidente de Firmado: Edgar Ynsfrán, Ministro del Interior. Fuente: GACETA OFICIAL N° 107. Páginas 2-3
Ministerio del Interior Decreto N° 24.581, del 7 de septiembre de 1962, por el que se da de baja, se asciende y se nombra Oficiales de El Presidente de Artículo 2°) Asciéndese a Oficial 1° de Firmado: Alfredo Stroessner, Presidente de Firmado: Edgar Ynsfrán, Ministro del Interior. Fuente: GACETA OFICIAL, 7 de septiembre de 1962. Página 6.
Nota: Alcibíades González Delvalle no era ningún agente de tránsito, según la legislación entonces vigente; es decir, .
Prensa argentina se hizo eco de cuerpos mutilados por la dictadura
La prensa escrita de Buenos Aires y Posadas, Argentina, publica fotos y describe en sus páginas la forma en que fueron hallados los cuerpos de los "guerrilleros" paraguayos asesinados por la dictadura stronista. El Frente Unido de Liberación Nacional del Paraguay recoge fragmentos de las crónicas y fotografías de los cadáveres y transcriben en una revista difundida en forma clandestina en nuestro país en el año 1960. A continuación se transcriben fragmentos y crónicas periodísticas y de comunicados de " " "Crítica, Bs. As., 12 de junio de 1960: A la altura del km. 1800 del río Paraná, se rescató el cadáver de un hombre, cuyos datos de filiación aún se ignoran. El médico de la repartición al examinar el cuerpo comprobó que presentaba dos heridas de bala y signos evidentes de violencias. Al respecto debe recordarse que con este ya son 12 los cadáveres mutilados recogidos de las aguas del Paraná". "
PRENSA DE POSADAS, MISIONES
"El Territorio", 29 de junio de 1960: Cadáver hallado el día 28 de junio en las proximidades de "Tribuna, 30 de junio de 1960: Sobre el mismo cadáver dice: ‘Este como las otras víctimas, en esta larga cadena de muertes, también había sido castrado’ ". "El Territorio, 6 de julio de 1960: Dando cuenta del cadáver aparecido a la altura de Santa Ana, el 5 de julio pasado, y que resultó ser de López Meza, dice: ‘Había sido degollado. Además presentaba una herida de arma blanca a la altura del corazón, corte debajo de la axila derecha, herida en el hombro izquierdo, cortes con arma blanca en una rodilla, y numerosas hematomas en distintos lugares del cuerpo. Pero lo más horrible son las mutilaciones de que fue objeto, lengua cortada al ras, ojos y uñas arrancados, lo que demuestra palpablemente que mientras tuvo vida fue sometido a pavorosas torturas, similares a las que padecieron los prisioneros de los campos de concentración nazis". "Tribuna, 12 de julio de 1960: Pública tres notas gráficas de los cadáveres recogidos en el Paraná y dice refiriéndose al estado en que fueron hallados: ‘Pudo observarse amputación de manos y pies, dedos machucados y sin uñas, ausencia de un ojo, una dentadura arrancada de cuajo, tórax atravesado por una profunda puñalada, cavidad craneana perforada por un largo clavo, cabeza sin orejas, torso brutalmente torturado, órganos genitales seccionados’ ". "El Territorio, 13 de julio de 1960: Sobre el cadáver hallado a la altura del puerto Piray, km. 1800, dice: ‘Se trata de un cuerpo humano crucificado sobre dos maderos en cruz, con la boca amordazada y la cuenca de los ojos vacía".
PARAGUAY. VERGONZOSA ACTUACIÒN DE
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